Cuando ví está receta en el instagram de Half Baked Harvest me llamó muchísimo la atención por la curiosa mezcla de pasta y garbanzos  y la guardé de inmediato entre mis favoritos para probarla en cuanto me fuera posible.

Una de las cosas que me encantó es que utiliza tomates de San Marzano (en lata), y es que este tipo de tomates en casa nos encantan. En Madrid es bastante difícil encontrarlos pero nosotros ahora mismo tenemos una pila de botes que nos trajimos este verano de Italia y probar esta receta me parecía una forma perfecta de utilizarlos.

Sin embargo, a los que tengáis interés en probar este tipo de tomate, el otro día y sin buscarlos (estas cosas suelen ser así, cuando no buscas encuentras) ví que los vendían en una tienda de productos italianos que se llama Casabase, y la marca que tienen es Mutti.

Pues bien, el otro día por fin me decidí a hacerla, y aunque introduje algún pequeño cambio por la falta de algún ingrediente he de deciros que la mezcla de pasta y garbanzos picantes es espectacular. En casa nos gustó muchísimo así que os animo a prepararla porque es muy fácil y no se tarda nada.

En 30 minutos la tendréis lista para servir. ¿A que así da gusto?

Ingredientes (para 2-3 personas)

1/4 cebolla picada en brunoise (trocitos pequeños)

1/2 bote de garbanzos cocidos (colad el líquido del bote y enjuagadlos con abundante agua)

2 cucharadas de Aceite de oliva virgen extra

1 cucharadita de Pimentón de la Vera

1 guindilla cayena pequeña (o 1/4 de cucharadita de la que venden troceada )

1/2 cucharadita de semillas de mostaza

1/2 cucharadita de semillas de hinojo (en caso de no tenerlas podéis usar un trocito de hinojo fresco o una estrella de anís)

Sal y pimienta negra

1 lata de tomates enteros pelados (si son de San Marzano mejor, aunque es difícil encontrarlos)

1/4 de taza de pesto genovés casero o comprado

200 gramos de pasta (yo he utilizado rigatoni)

1 burrata

unas hojas de albahaca fresca

 

Preparación

1. En una cazuela  echamos el aceite y la cebolla troceada y pochamos durante unos minutos a fuego medio hasta que esté transparente (si vamos a usar hinojo fresco agregadlo en este paso). Añadimos los garbanzos, las semillas de mostaza y de hinojo (o en su defecto la estrella de anís, que deberéis retirar antes de servir), la guindilla, el pimentón y un poco de sal. Mezclamos bien y cocinamos sin dejar de remover hasta que estén dorados los garbanzos. Lo vertemos en un plato o cuenco y reservamos.
2. En la misma cazuela sin lavar echamos el tomate que trocearemos con la ayuda de la espátula o si queréis directamente con las manos antes de echarlos, 1/4 de taza de agua, el pesto y un poco de sal y pimienta.  Agregamos una pizca de azúcar (opcional) para reducir la acidez y dejamos cocer a fuego lento hasta que reduzca, unos 10-15 minutos aproximadamente.
3. Mientras tanto, en una cazuela aparte hervimos agua con un poco de sal para cocer la pasta siguiente las instrucciones del paquete en cuanto a tiempo de cocción. Yo os recomiendo que sea al dente. Una vez cocida, colad la pasta y echadla en la cazuela donde hemos hecho la salsa de tomate y mezclad bien.
4. Para servirlo, vertemos la pasta en una fuente grande, echamos los garbanzos por encima y en el centro ponemos la burrata (rompedla por el medio). Decoramos con las hojas de albahaca y un poco de pesto (si os ha sobrado).

 

Ahora sólo queda disfrutarla y recordad que al final del post tenéis el link a la receta imprimible.

Aquí tenéis el enlace a la receta imprimible de la Pasta con garbanzos.

Fácil y rápida de hacer. Espero que la disfrutéis!

 

Nadia.